Es posible que cuando estén leyendo estas líneas ya se hayan superado los 10.000 millones de 'tweets' en Twitter. La cuenta la llevan en http://popacular.com/gigatweet/ por si alguien tiene interés en seguirla en directo.




Para llegar a esta cifra habrán hecho falta muchas horas de darle al dedo. Y mucha perseverancia, porque esta es una de las claves de la red social, surgida como alternativa corta y espontánea a los blogs, más largos y elaborados.

Algunos datos curiosos. El tipo que tiene más seguidores en Twitter, según Twitterholic.com, es Ashton Kutcher, el marido de Demi Moore e impulsor de algunas empresas tecnológicas curiosas, como Ooma, una alternativa a Skype, y Katalyst Media, propietaria de Saysme.tv, dedicada a los anuncios televisivos en internet. Pero igual basa más su popularidad en contar chismes de su esposa (que también tiene microblog).

El resto de la lista está llena de famosetes yanquis (KIm Kardashian, Ophra, Martha Steward... ) y otros algo más globales como Britney Spears, Lady Gaga o Ellen de Generes. Bueno, y está Obama, que aunque tiene muchos amigos, twittea poco (¿se imaginan, debajo de la mesa del despacho oval dándole a la tecla?)

La lista, por lo demás, no tiene desperdicio. Desde Rania de Jordania (insigne twittera) al Dalai Lama. Por estar, está hasta Dios y tiene página en portugués (@Deus), si alguien tiene curiosidad. Es un consuelo saber que tiene más seguidores que Sarah Pallin.

Los hay que han construido su red con mucho mensaje y en mucho tiempo. Otros, dicen las malas lenguas, son de compra... Cada cual que piense lo que quiera.

Twitter --desde el teléfono y la red-- es, hoy, el SMS global. Hubo un tiempo en que había que estar en Facebook. Hoy la moda es Twitter.